Crear una empresa innovadora, capaz de lanzar nuevos productos y servicios dos veces al año, no es cuestión de seguir un manual frío.
Es más bien una combinación de creatividad, estructura y, sobre todo, una cultura que respire innovación en todas partes.
Te cuento cómo puedes construirlo paso a paso:
1. Fomenta una cultura de innovación
Piensa en un lugar donde a todos les guste traer cualquier idea, por loca que parezca, y probar sin miedo a equivocarse. ¿Te imaginas?
Crear una cultura de innovación es así: dar espacio a la creatividad, hacer que cada idea, por pequeña que se considere, cuente.
Las sesiones de brainstorming o talleres creativos pueden ser clave.
Y si tienes equipos con perfiles diversos, ¡mejor! Las ideas florecen donde las perspectivas son diferentes.
2. Ten un proceso para que las ideas avancen
Imagina que alguien tiene una idea genial. ¿Y ahora qué?
Sin un proceso, esa idea puede quedarse en el aire.
Por eso, es fundamental que haya una estructura para recoger ideas, evaluarlas y probarlas rápido.
Crea oportunidades como hackathons internos o reuniones de ideación para que las ideas no se queden en los pasillos.
Que cada idea que guste tenga su oportunidad de convertirse en un prototipo, de forma expedita, para probar y refinar ideas rápidamente. Esto reduce el tiempo de desarrollo y lanzamiento al mercado.
3. Ponte metas inspiradoras
Si quieres que el equipo se lance a por lo nuevo, dales una meta que inspire:
“Este año, vamos a lanzar al menos dos productos o servicios nuevos”.
Fija plazos, divide el objetivo en pasos claros y celebra cada hito alcanzado.
También, establece formas de medir si vamos en la dirección correcta, los KPIs para evaluar el éxito, como el número de ideas lanzadas, la reacción de los clientes y las mejoras que estas aportan.
4. Usa la tecnología a tu favor
¿Hay alguna herramienta que facilite el proceso?
Desde aplicaciones de diseño hasta análisis de datos, la tecnología nos permite acelerar el desarrollo y entender mejor lo que el cliente quiere.
Mantente al día con las tendencias, que el mercado mismo te inspire a innovar.
5. Colabora con otros para ver más allá
La innovación no siempre está dentro de casa.
A veces, mirar afuera es la mejor manera de inspirarse.
Hacer alianzas con otras empresas o incluso con universidades puede traer aire fresco a tu negocio.
También puedes invitar a tus propios clientes a que opinen y den ideas:
La innovación abierta nos recuerda que las buenas ideas pueden venir de cualquier lado.
6. Flexibilidad y un líder que marque el rumbo
Innovar requiere libertad.
Flexibiliza horarios y fomenta el trabajo remoto si eso ayuda a que las ideas fluyan.
También es clave que alguien lidere el área de innovación.
Ese líder debe tener una visión clara, saber dónde enfocar la energía y tomar decisiones cuando haya que elegir por dónde ir.
Con estos pasos, puedes transformar tu empresa en un espacio de creatividad constante y hacer de la innovación una práctica habitual.
¿Parece mucho para una PYME crear una empresa innovadora?
Puede ser, pero ya sabes que cualquier negocio que quiera crecer necesita una dosis de innovación.
La clave está en arrancar hoy, aunque sea con pasos pequeños.
Recuerda: innovar es una cultura.
No importa cuántos empleados tengas, sino que el espíritu de mejorar y crecer esté presente en tu empresa cada día.
Hazlo antes que tu competencia, que el mejor momento siempre es ahora.
¿Ya estás en ello?
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