El arte de competir por precio. Os habrá pasado alguna vez… que al llegar a un sitio de vacaciones y al buscar un restaurante, llegáis a una zona en la que hay muchos.
Algunos están totalmente llenos, y otros casi vacíos… Como en cualquier sector, la finalidad es competir, pero hay que hacerlo de la manera correcta.
Te pongo un ejemplo…
Al lado de mi casa hay una esquina que me parece idónea para un restaurante y, sin embargo, ya hemos visto 5 que abren con mucho entusiasmo, y al poco tiempo esto se desvanece…
¡Todos cierran!
¿La suerte?
Existe, sí, pero, en general, tiene que ver con la diferenciación, la calidad y el precio.
En las empresas pasa algo parecido y, sobre todo las PYMES, que tratan de competir por precio.
Mala estrategia.
Compite con diferenciación, a través, por ejemplo, del diseño o de la calidad del servicio post-venta y, sobre todo, vende diferente…comunícalo mejor, aplicando un ángulo que contraste con el resto de tu sector.
Te recomiendo los libros de Isra Bravo, explican bien cómo se vende a través de historias entretenidas y persuasivas, que conectan con la emoción de tus clientes potenciales.
No uses el mismo ladrillo que es habitual en tu sector.
Innova…
Cuenta una historia y vende de manera diferente.
¡El precio no es lo único que vale!
Vemos como muchos empresarios, sólo fijan sus ojos en reaccionar ante las acciones de los competidores…
En vez de analizar cómo hacer que su producto o servicio se pueda ofrecer de una forma distinta a como lo hacen los demás, si dejaran de pensar en el negocio histórico y se pudieran plantear una reinvención de su estrategia de producto y ventas, tendrían nuevos y mejores resultados.
Recuerda que, mantener el impulso de las ventas basado en promociones de precio, hará que tengas un negocio como una montaña rusa, en el que la facturación sólo volverá levantar, cuando llegue el próximo periodo de ofertas.
En el mercado hay personas dispuestas a pagar más dinero por mayor calidad.
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