¿Qué hace que algunos proyectos logren captar la atención de miles de pequeños inversores mientras otros pasan desapercibidos? Hoy te explicaré las claves para entender cómo funciona el crowdfunding, y lo que debes hacer para que tu idea destaque en medio de la multitud, pon atención porque casi seguro te interesa.
Financiación desde la multitud, puede ser la traducción más acertada de crowdfunding.
En realidad, son empresas que han conseguido un registro en la CNMV, para actuar como plataformas de crowdfunding que permiten captar inversores, para proyectos listados en su plataforma, desde cantidades muy bajas.
¿Para qué sirve el crowdfunding?
Para financiar proyectos que no están a la altura de un inversor profesional, porque todavía no tiene las métricas que éstos piden o porque todavía tiene que probar su modelo de negocio.
En España hay ya varias plataformas de Crowdfunding, la que conozco mejor y una de las primeras en ofertar sus servicios –cuando se llamaba Socios Inversores– tiene ya 40.000 Inversores y se atreve con financiaciones por encima del millón de euros.
La clave para levantar dinero a través del crowdfunding, es lo atractivo que sea el proyecto y la capacidad que tengas de apoyarlo cuando decaiga.
Me explico, los inversores son un poco manada, cuando más personas interesadas inviertan en un proyecto, más interés generan sobre el mismo, pero, en muchos casos, hay momentos en los que, durante días, nadie invierte y eso puede causar un desastre en el crecimiento de las inversiones para el proyecto.
Es fundamental estar encima y cuando esto suceda, tener varios inversores afines que inviertan precisamente cuando lo necesitemos, con el objetivo en mantener el interés de todos los inversores –los que consiguen ser multitud– pues en promedios 300 ó 400 Euros por inversión, algo muy corriente- no es sencillo llegar a los 900.000 o un millón de euros.
Las ventajas adicionales del Crowfunding, la proporcionan en cuanto a la valoración que se alcanza, siempre más alta que ante inversores profesionales y te permite abrir la inversión a gente que quiere arriesgar muy poco pero que le interesa tu proyecto.
Un factor muy relevante es el acuerdo de accionistas y que las inversiones se canalicen a través de un vehículo que actúe como representante de todos los inversores.
Intentar gestionar miles de inversores desde tu empresa sería un dolor de cabeza que no necesitas.
Las empresas de crowdfunding ofrecen un servicio adicional -claro lo cobran- por el que te organizan y gestionan el vehículo inversor.
El tener una multitud de inversores gestionados a través de una sola plataforma te permite ampliar tu número de potenciales clientes y descubrir verdaderas gemas entre ellos.
Puede que alguien que ha invertido 3.000 Euros sea un inversor profesional que quiere seguirle la pista al proyecto, y que luego, cuando haya que llevar a cabo una siguiente ronda, se ofrezca a ayudarte o sea el motor de la misma.
Es una buena solución, sobre todo si tienes muchos interesados en invertir cantidades pequeñas que tú no puedes ofrecerles.
La inversión mínima varía de proyecto en proyecto y depende también de la plataforma con la que lo lleves a cabo.
Hay ya muchos estudios comparativos sobre las distintas plataformas que hay en España y conviene dedicarle un par de semanas a estudiar las ventajas e inconvenientes de cada una.
Ninguna es perfecta.
Recuerda, en el crowdfunding, no es sólo el dinero lo que importa, sino las conexiones y oportunidades que surgen al involucrar a una multitud de inversores.
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